Copa Mundial Argentina – Una secuela en 2018

Recuerdos

Diciembre de 2018… retroceso a la Exposición Mundial Canina 2005, Buenos Aires, Argentina.
Grandes recuerdos.
Durante casi 13 años tuve que escuchar historias sobre su primer viaje a Sudamérica. ¡Les encantó!
Para Steffie y Max, este fue uno de los viajes más memorables junto a sus perros.
Max incluso escribió un relato sobre ese viaje específico, como se puede ver más arriba.
Pero la cosa es… que esa historia en realidad nunca estuvo 100% completa. Siempre faltaba algo…

 

Pasión por los pájaros

Las personas cercanas a mi padre saben que había otra pasión en su vida. Obviamente, primero Steffie, pero aparte de los perros, amaba a sus pájaros.
Si no estaba ocupado con los perros, se podía encontrar a Max en el aviario, junto a sus pequeños amigos emplumados.

 

Tucán

Mientras visitaban Buenos Aires en 2005, Steffie y Max se enamoraron de una estatua artesanal de un tucán, hecha con piedras preciosas argentinas.
La habían visto en una pequeña tienda de antigüedades, situada cerca de la entrada del hotel donde se alojaban.
Steffie, de hecho, ¡todavía lleva en 2018 la tarjeta de entrada estilo tarjeta de visita de la habitación del hotel en su bolso!

Para resumir la historia: se enamoraron de esa pequeña estatua y la reservaron para llevársela a casa.
Debido a lo delicado de la pieza, Max y Steffie decidieron recogerla en el último momento, justo antes de ir al aeropuerto, camino de regreso a Europa.

Lamentablemente, por la presión del tiempo y el miedo a perder el vuelo, nunca llegaron a recogerla.

Después de escuchar esta historia durante más de 13 años, puedo describir con lujo de detalles cómo debía ser esa pequeña estatua.
Han sido tan específicos sobre los colores, el tamaño, las piedras utilizadas, que si la veo… la reconoceré al instante.

 

Buenos Aires 2018

Y allí fuimos. Mariela como guía de la ciudad (ella nació en Buenos Aires) y yo, armado con la tarjeta de entrada de una habitación de hotel, nos dirigimos al centro de Buenos Aires.

¡Tienda de antigüedades encontrada!

Después de tomar un taxi, caminar, y hablar con algunas personas que conocían la zona, finalmente encontramos la tienda de antigüedades —casi exactamente como la había descrito Steffie.

Hablamos con la dueña de la tienda y le contamos la historia del pequeño tucán… Al principio, todo se sentía como buscar una aguja en un pajar. La señora se alejó, y después de cinco minutos volvió al mostrador.

Nos quedamos sin palabras. No podíamos creer lo que veíamos. Ahí estaba. Exactamente como lo habían descrito Max y Steffie. Después de 13 años. Un pequeño y hermoso tucán, erguido con orgullo sobre su piedra, con sus patitas doradas, su gran pico azul claro opaco, su cola azul y su cuerpo de un tono marrón rojizo… no había duda alguna: ¡tenía que ser “él”!

 

Círculo cerrado

Casi es Navidad, y es hora de llevarte de vuelta a “casa”, mi pequeño amigo emplumado…

Es momento de cerrar el círculo…

Te quiero…

The Toucan